La biblioteca escolar, aparece siempre en todas las menciones, como el espacio para muchas cosas, para aprender, desarrollar, reflexionar, investigar, etc… y todo ello es cierto, pero personalmente siempre he preferido verlo como un medio para llegar algún lado, y en este caso me gusta la metáfora del puente.
Particularmente considero, que la biblioteca escolar, es ese medio de vital importancia que permitiría hacer la diferencia entre una educación de calidad y una educación meramente lecto-escritora. Nuestros resultados en las evaluaciones internacionales PISA, demuestran a la fecha una situación bastante crítica de la educación en nuestro país. Nuestros alumnos tienen muchas dificultades para comprender lo que leen; la educación lecto-escritora, les enseñó a reconocer palabras y dibujarlas sobre el papel, pero no se trabajó lo suficiente en las partes comprensivas, relacionales, analíticas y/o interpretativas, y ahí están los resultados.
Ahora la capacidad de comprensión, no es algo que se pueda aprender memorizando algún tipo de formula, sino a través del cultivo del hábito de la lectura, el cual es el mejor estimulo para ejercitar el cerebro para relacionar ideas, reconocer nuevas palabras, imaginar escenarios, entre otros beneficios. En ese sentido, la promoción de la lectura, encuentra en la biblioteca al espacio ideal para encontrar a docentes y estudiantes, con el conocimiento y el entretenimiento literario.
Sin embargo, lo ideal dista mucho de la realidad, y lo real es que no todos los colegios cuentan con una biblioteca escolar, y los colegios que cuentan con una biblioteca (mediana o pequeña) en la mayoría de casos lo utilizan como un espacio complementario, prescindible y desvirtuado de su verdadera razón de ser.
Sin ánimo de entrar en la complejidad de las causales de este abandono, podemos considerar dos razones fundamentales, la primera por factores externos, el desarrollo de las tecnologías de la información, la accesibilidad a internet desde los hogares, el avasallamiento televisivo, etc. Pero hay también factores internos muy importantes. Como la limitada promoción de la lectura, la falta de personal adecuado para cumplir las funciones necesarias, pero sobre todo la falta de capacidad para integrarse dentro del sistema de funcionamiento de la institución.
Esto último se podría considerar como una de las falencias más importantes, debido a que la falta de integración, deriva irremediablemente en una falta de valoración, de todo el sistema que al no entender la importancia de su función termina por aislarla y por asignarle tareas poco funcionales.
Fuente: http://www.larepublica.pe/03-09-2013/en-lima-solo-hay-unas-50-bibliotecas-y-no-cuentan-con-personal-capacitado |
Desde Bibliogeek, tenemos la voluntad de hacer esfuerzos por mejorar esta situación de las bibliotecas escolares, ensayando pilotos, actividades y planteamientos, que permitan reposicionarlas en el lugar que se merecen, y este es el año, en que se ha decidido empezar, preparados o no, lo importante es empezar a hacer. Caminante no hay camino, se hace camino al andar.